Estoque (medieval)
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Estoque medieval español, Siglo XV
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[editar] Definición
RAE SVIII: Espada angosta y de cuatro esquinas, que por lo regular suele ser de más de marca, y se juega siempre de punta. (Interpretación: Espada de punzar que se estrecha desde la empuñadura, más larga de la norma y de hoja con forma romboidal
Un estoque medieval es una espada cuya hoja, acabada siempre en afilada punta de tres o más mesas (Lados de la hoja) y angosta (Que se va estrechando desde la empuñadura hasta la punta), que no taja sino punza, que derivó de las espadas de armas medievales para hacer frente a, primero a la cota de mallas y posterior -y principalmente- a los arneses (Armadura blanca, completa de placas metálicas).
[editar] Orígenes
Los estoques son un arma que aparece en muchas obras artísticas medievales, sobre todo en el arte francés medieval, de hecho, con casi total seguridad, si no su invención, pero si su popularización, llegó de Francia. Esto se puede ver claramente es textos y pinturas coetáneos de la Guerra de los Cien Años.
Como en muchas ocasiones, la invención de un arma se puede atribuir a un pueblo, nación o persona dependiendo de los trabajos de los historiadores y especialistas, pero en el caso del estoque, o stoc en francés, me remito a este texto de Góngora:
- Cuyas armas siempre fueron,
- aunque abolladas, triunphantes
- de los Franceses estoques
- y de los Turcos alfanges
Respecto a la época en la que se desarrolló el estoque medieval, y dado que el estoque que actualmente más se conoce, -y que no es otra que la Espada ropera, la cual es la segunda mayor invención en armas blancas española o ibérica tras el “Gladius o Falcata Hispanense“-, por lo cual hay que diferenciarlos, podemos decir que sus orígenes se sitúan sobre el año 1500, pero sólo podemos hacer cábalas. El por qué, radica en que esta arma, cuyos fondos arqueológicos o de colecciones la podrían situar en torno al siglo XIV, es una evolución militar -como casi siempre- para poder superar las armas defensivas (Armaduras). Y el hecho de que, por ejemplo el Arnés de Sancho IV de Castilla date de 1285!, nos da una idea de que, -supuestamente-, en el siglo XIII, o incluso el siglo XII, tanto los arneses como sus oponentes las “espadas de estoque” estuvieran más generalizadas de los que se cree. De hecho, en la Guerra de los Cien Años, -su versión artística (Las pinturas y prosa que conocemos)- no suelen aparecer espadas medievales (Las de doble filo a una mano, y punta casi roma, típicas) y si estoques y bracamartes (Falchion en inglés), y esto quiere decir que en el siglo XIV ya estaba generalizado el uso del estoque en la panoplia de un hombre de armas.
[editar] El Estoque Medieval en la Historia
Puesto que ya hemos visto ciertas referencias sobre por qué y cómo apareció el estoque medieval, sólo hay que mostrar los siglos en los cuales se empleó, y por qué, de ello y de su desuso final.
El estoque fue un arma especializada para el combate contra arnés, del mismo modo que lo fueron las mazas y hachas de armas, los manguales, los martillos-picos y demás armas enastadas de, principalmente, el bajo medievo. Por esa razón, el estoque medieval perduró mientras las excelsas armaduras de placas fracasaron, siendo la razón fundamental de su desuso la introducción de la pólvora en el armamento medieval.
Para hacernos una ligera idea, la paulatina introducción de la pólvora en armas individuales, como los mosquetes o arcabuces, cambió radicalmente la necesidad de estar protegido por una panoplia defensiva de 25Kgs. que no siempre protegía de una disparo certero o a bocajarro. Por ello, poco a poco, la única protección de un soldado que se preciara fue la coraza, brazales, yelmo y poco más -sobre todo en unidades a monta-. Pues más valía movilidad que aguante. Y es pues esta razón por la cual los estoques medievales acabaron evolucionando hacia una espada más ligera -que no endeble- a la que se denominó estoque o espada ropera (rapier en inglés). Pero, si nos atenemos a los orígenes de estas armas más ligeras – Eran menos angostas, puesto que su hoja solía ser estrecha de principio a fin-, que se sitúan justo al inico del siglo XVI, se puede deducir que las espadas de guerra (estoques medievales) y las de uso más civil o duelístico (Roperas) fueron durante años coetáneas. Aunque bien es cierto que todas las variantes de espadas medievales (A una mano) fueron relegadas a armas secundarias -“envainadas”- puesto que las armas “especializadas” eran más efectivas. Y así pues, las espadas que perduraron a partir del siglo XVII fueron las más óptimas para el combate experto con esgrima o las militarmente “potentes” (Montantes, espadones -sobre todo usados por mercenarios o tropas veteranas como los Lansquetenes, tanto en la guerra abierta como en los duelos en poblaciones (Roperas, espadines).
[editar] Morfología
Los estoques del medievo solían ser espadas afiladísimas en su dura punta, sin filo cortante, y cuya hoja, más larga que las de sus homónimas alto medievales, tenía forma romboidal o hexagonal. Su longitud total excedía del metro como norma general, y esto es refutado -aun encontrando ejemplares más cortos- por el uso de ambas manos (Una en la empuñadura y otra en el segundo tercio de la hoja) a la hora de “estocar” (Atacar de punza) a los oponentes. También habían “estoques de mano y media”, muy en uso en cuando en cuanto las escuelas de esgrima o la necesidad demostraron su mejor uso mientras se estaba “armado defensivamente”. Además, otra característica que se reconoce es su “dureza” y “rigidez”. Aún siendo armas de punta estrecha, la técnica en su forja las dotaba de un aguante al uso más que reconocido.
Estas espadas se diferencian más que por la hoja -que era mucho más ancha en su inico en las épocas alto medievales-, por su empuñadura y cruz a las versiones “ligeras” o “civiles” del fin de la Edad Media. Mientras que un estoque medieval suele guardar la forma de ” cruz” es sus gavilanes, sus derivadas “roperas” ofrecen una compleja guarda -con guardamanos, gavilanes retorcios, cazoletas, conchas, etc.. que las distinguen totalmente de sus parientes alto medievales.
El peso de los estoques medievales pocas veces llegaban a los 2Kgs en sus versiones a una mano. A mano y media puede que superaran los dos kilogramos, pero era más una razón de esgrima que una de relación peso/longitud igual a mayor potencia.